QUINARIO EN HONOR DEL SANTÍSIMO CRISTO DE LA MISERICORDIA

TEXTO DEL QUINARIO AL SANTÍSIMO CRISTO DE LA MISERICORDIA

ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS
Oh Cristo de la Misericordia,
que llevado de vuestro gran amor hacia nosotros,

habéis querido ser crucificado

y derramar vuestra Sangre

para redimir y salvar nuestras almas;

dirigid una mirada a todos los torremengueños

que llenos de santo recogimiento

estamos aquí recordando vuestra dolorosa pasión y muerte.
Con vuestra misericordia

purificadnos del pecado,

santificad nuestro trabajo,

dadnos a nosotros y a nuestros allegados

el pan de cada día, endulzad nuestras penas,

bendecid nuestras familias

y conceded a nuestro pueblo vuestra paz,
que sólo ella es la paz verdadera,

a fin de que, obedeciendo vuestros mandamientos,

podamos llegar un día a la gloria del Cielo.
Así sea.

DÍA PRIMERO

ORACIÓN COMUNITARIA

Lector: Elevemos los ojos a Cristo que fue crucificado, murió y resucitó por todos los hombres, y digámosle confiados:
Todos: Salva, Señor a los que redimiste con tu Sangre.
Lector: Te bendecimos, Señor Jesús, a Ti que por nosotros aceptaste el suplicio de la Cruz, y nos redimiste con tu preciosa sangre.
Todos: Salva, Señor a los que redimiste con tu Sangre.
Lector: Tú que prometiste a los que en Ti creyeran un agua que salta hasta la vida eterna, derrama tu Espíritu sobre todos los hombres.
Todos: Salva, Señor a los que redimiste con tu Sangre.
Lector: Tú que enviaste a tus discípulos a predicar el Evangelio, ayúdalos, para que extiendan la victoria de la Cruz.
Todos: Salva, Señor a los que redimiste con tu Sangre.
Lector: A los enfermos y a todos los que has asociado a los sufrimientos de tu Pasión, concédeles fortaleza y paciencia.
Todos: Salva, Señor a los que redimiste con tu Sangre.
Lector: Acuérdate de tu Hermandad y de esta comunidad aquí reunida, y concédenos la gracia de conocerte, amarte y seguirte.
Todos: Salva, Señor a los que redimiste con tu Sangre.

INCENSACIÓN E HIMNO AL SANTÍSIMO CRISTO

ORACIÓN FINAL
Señor, padre Santo, que quisiste que Jesucristo tu Hijo fuese el precio de nuestro rescate, haz que vivamos de tal manera que, tomando parte en sus padecimientos, nos gocemos también en la revelación de su gloria. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor.

DÍA SEGUNDO

ORACIÓN COMUNITARIA
Lector: Invoquemos a Jesucristo nuestro Redentor, que nos ha redimido por su Cruz, y digámosle:
Todos: Por tu Cruz, Señor, llévanos a tu Reino.
Lector: Señor Jesucristo, Tú que te despojaste de tu rango y tomaste la condición de esclavo, pasando por uno de tantos, haz que los miembros de la Iglesia imitemos tu humildad
Todos: Por tu Cruz, Señor, llévanos a tu Reino.
Lector: Señor Jesucristo. Tú que te humillaste hasta someterte incluso a la muerte y una muerte de Cruz, concédenos seguir tu ejemplo de entrega generosa por amor a los hombres.
Todos: Por tu Cruz, Señor, llévanos a tu Reino.
Lector: Señor Jesucristo, Tú que fuiste levantado sobre todas las cosas por Dios, que te concedió el Nombre sobre todo nombre, concede a tus fieles la perseverancia hasta el fin.
Todos: Por tu Cruz, Señor, llévanos a tu Reino.
Lector: Señor Jesucristo, a cuyo nombre se dobla toda rodilla en el cielo, en la tierra y en el abismo, infunde el amor a Dios y a los hombres en los miembros de tu Hermandad y en todos los aquí reunidos, para que te adoremos con fe.
Todos: Por tu Cruz, Señor, llévanos a tu Reino

INCENSACIÓN E HIMNO AL SANTÍSIMO CRISTO

ORACIÓN FINAL
Te pedimos, Señor Padre nuestro, que los que hemos sido aleccionadas con los ejemplos de la Pasión de tu Hijo estemos siempre dispuestos a cargar con su yugo llevadero y con la carga ligera. Por Jesucristo nuestro Señor.

DÍA TERCERO

ORACIÓN COMUNITARIA
Lector: Invoquemos a Jesucristo nuestro Redentor, que nos ha redimido en el árbol de la Cruz, y digámosle
Todos: Por tu Cruz, Señor, has redimido el mundo.
Lector: Señor Jesús, Hijo de Dios, que fuiste levantado en la Cruz, como Moisés levantó la serpiente en el desierto; Llévanos a la felicidad de tu Reino.
Todos: Por tu Cruz, Señor, has redimido el mundo.
Lector: Jesús, Hijo único de Dios Padre, que fuiste dado al mundo para que todo el que crea en Ti no perezca, concede la vida eterna a los que buscamos tu rostro.
Todos: Por tu Cruz, Señor, has redimido el mundo.
Lector: Jesús, Hijo eterno del Padre, que viniste a prender fuego en el mundo y deseaste intensamente que estuviera ya ardiendo, concédenos venir a tu luz y actuar conforme a tu verdad.
Todos: Por tu Cruz, Señor, has redimido el mundo.
Lector: Jesús, Hijo amado del Padre, que has sido enviado al mundo, no para condenarlo, sino para que se salve por Ti, llena de fe a los miembros de tu Hermandad y a todos los que nos encontramos aquí reunidos.
Todos: Por tu Cruz, Señor, has redimido el mundo.

INCENSACIÓN E HIMNO AL SANTÍSIMO CRISTO

ORACIÓN FINAL
Señor, Dios Padre Nuestro, que has querido realizar la salvación de todos los hombres por medio de Jesucristo tu Hijo muerto en la Cruz, concédenos a quienes hemos conocido en la tierra este misterio, alcanzar en el cielo los premios de la Redención. Por Jesucristo nuestro Señor.

DÍA CUARTO

ORACIÓN COMUNITARIA
Lector: Adoremos a Jesucristo nuestro Redentor, que por nosotros y por todos los hombres quiso morir en la Cruz para resucitar de entre los muertos, y supliquémosle diciendo:
Todos: Señor, ten piedad de nosotros.
Lector: Señor Jesucristo, Maestro nuestro, que por nosotros te sometiste incluso a la muerte, enséñanos a someternos siempre a la voluntad del Padre.
Todos: Señor, ten piedad de nosotros.
Lector: Tú que, siendo nuestra vida, quisiste morir en la Cruz para destruir la muerte y todo su poder, haz que contigo sepamos morir al pecado y resucitemos contigo a una vida nueva.
Todos: Señor, ten piedad de nosotros.
Lector: Tú que al ser elevado en la Cruz atrajiste hacia Ti a todos los hombres, reúne en tu reino a todos los hijos de Dios dispersos por el mundo.
Todos: Señor, ten piedad de nosotros.
Lector: Jesús, Salvador de todos los hombres, que diste tu vida por los hermanos, enseña a los miembros de tu Hermandad y a todos los aquí presentes a amarnos mutuamente con un amor semejante al tuyo.
Todos: Señor, ten piedad de nosotros.

INCENSACIÓN E HIMNO AL SANTÍSIMO CRISTO

ORACIÓN FINAL
Oh Dios, Padre Nuestro, que has redimido a todos los hombres con la Sangre preciosa de Jesucristo tu Hijo, conserva en nosotros la acción de tu misericordia, para que, celebrando siempre el misterio de nuestra salvación, podamos conseguir sus frutos. Por Jesucristo nuestro Señor.

DÍA QUINTO

ORACIÓN COMUNITARIA
Lector: Acudamos a Cristo, nuestro Salvador, que nos redimió con su Muerte y Resurrección, y supliquémosle diciendo:
Todos: Señor ten piedad de nosotros.
Lector: Señor Jesús, Tú que subiste a Jerusalén para sufrir la Pasión y entrar así en la gloria, conduce a tu Iglesia a la Pascua eterna.
Todos: Señor ten piedad de nosotros.
Lector: Tú que, levantado en la cruz, quisiste ser atravesado por la lanza del soldado, sana nuestras heridas.
Todos: Señor ten piedad de nosotros.
Lector: Tú que convertiste el madero de la cruz en árbol de vida, haz que los renacidos en el Bautismo gocen de la abundancia de los frutos de este árbol
Todos: Señor ten piedad de nosotros.
Lector: Tú que clavado en la cruz perdonaste al ladrón arrepentido, perdónanos también a nosotros pecadores.
Todos: Señor ten piedad de nosotros.
Lector: Tú que entregaste tu vida por todos; acuérdate de tu Hermandad y de todos los que hoy nos reunimos aquí, y haznos verdaderos discípulos tuyos.
Todos: Señor ten piedad de nosotros.

INCENSACIÓN E HIMNO AL SANTISIMO CRISTO

ORACIÓN FINAL
Oh Dios, Padre nuestro, que de una manera admirable, has manifestado tu sabiduría escondida, con el escándalo de la Cruz, concédenos contemplar con tal plenitud de fe la gloria de la Pasión de tu Hijo, que siempre nos gloriemos confiadamente en la Cruz de Jesucristo. Que vive y reina contigo por los siglos de los siglos.